Ocho formas en las que podrían hackear tu casa conectada a Internet

Si eres de los que alucinaba con Regreso al Futuro II y llevas media vida esperando a que todo lo que salía en la famosa peli se hiciera realidad, ya sabes que la mitad de las cosas que ocurría en el futuro de los ochenteros ya forma parte de nuestro día a día. A la otra mitad, le queda poco tiempo para que sea mainstream.

Sin embargo, algo que se les pasó por alto a los guionistas de los años ochenta -quizás porque todavía era algo desconocido para la inmensa mayoría- era la capacidad de conectar toda nuestra vida a Internet. Y como la mayor parte de nuestra vida la pasamos en casa, es justo ahí donde más conexiones tenemos a la red y, por tanto, es el lugar donde tenemos el mayor número de vectores de entrada para que los cibercriminales nos den un buen susto.

Internet of Things

Si eres un early adopter tendrás en tu casa la mayoría de los dispositivos que comentamos en este post. Si no lo eres, los tendrás en los próximos cinco años. No lo dudes. Lo que sí está claro es que “todos los dispositivos que hay conectados a Internet en tu casa son un potencial ejército de zombies cargados de virus esperando a que un ciberdelincuente los despierte, si no cuentas con un sistema de seguridad que los vigile y los proteja a todos a la vez”, señala Hervé Lambert, Retail Product Manager at Panda Security.

Por eso, en Panda Security estamos creando nuevos productos diseñados para vigilar la seguridad de todo aquello que tienes en casa y que está conectado al Internet de las Cosas.

Estamos trabajando en ayudarte a que evites todo tipo de ataques de ramsomware que podrías recibir a través de cualquier dispositivo que tienes en casas, desde la puerta del garaje que se conecta a tu móvil para abrirse cuando llegas con el coche, hasta el contador de la luz que le dice  tu compañía eléctrica cuánto has consumido”, destaca Hervé Lambert, Retail Product Manager at Panda Security.

Algunos de los hacks que podrían hacerle a tu casa conectada al Internet of Things

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Bromas de mal gusto:

No todas las amenazas que hay en el IoT tienen por qué ser peligrosas. De hecho, las bromas de mal gusto son un clásico de toda la vida que los ciberdelincuentes pueden llegar a perpetrar por mero entretenimiento. Imagínate que unos hackers se hacen con el control de algunos de esos dispositivos que usas para pedir directamente a la tienda productos básicos como la leche o el papel higiénico. Las consecuencias de este tipo de bromas podrían ser muy molestas.

Aunque todavía no es algo corriente en la mayoría de las casas, cuando se convierta en una realidad común para todos, los ciberdelincuentes podrán usar técnicas de ransomware para, literalmente, secuestrar nuestra nevera y que no podamos abrirla hasta que paguemos un rescate.

Quemarte la cocina si no pagas un rescate

Algo parecido puede pasar con tu aspiradora, ya que los criminales podrían gastarte la broma pesada de hacer que se encienda, por ejemplo, todos los días a las tres de la mañana. O incluso algo peor, podrían programar que empiece a funcionar mientras no estás en casa y hacer que nunca se apague. Esto podría provocar que se quemase y, muy probablemente que se incendie tu casa. Y, cómo no, los ciber delincuentes podrían hacer lo mismo con tu horno o tu microondas conectado a Internet para quemarte la cocina y pedirte un rescate en tiempo real para que lo evites.

Pero no todo los que los cibercriminales podrían hacer en tu casa conectada a Internet se trata de quemar cosas por medio de técnicas de ramsonware. La imaginación de este tipo de hackers es casi infinita y, por ejemplo, podrían secuestrar tu lavavajillas e inutilizarlo cuando lo tienes lleno de platos hasta que no pagues un rescate. El menor de los problemas es que tendrías que lavar a mano unos días, pero más problemático sería que todo lo que hay dentro se pudriera durante varias semanas y apestase tu casa.

Tomar el control de tu coche o robártelo todo

Si no tienes medidas de seguridad en tu casa conectada a Internet, con suerte todo puede quedar en una broma pesada en forma de tostarte demasiado el pan o de no dejarte pedir nuevas cápsulas para tu cafetera, pero si das con ciberdelincuentes o ciberacosadores todo podría ser mucho más grave.

Tu coche conectado a Internet y a tu teléfono móvil puede ser un potencial peligro para tu vida y el de otras muchas personas si no cuentas con las medidas de seguridad adecuadas. Cierto es que los cibercriminales podrían secuestrar tu coche por medio de alguna técnica de ransomware, pero lo realmente preocupante es que programen el motor para que acelere a fondo o para que los frenos dejen de funcionar.

Ya hemos visto que podrían entrar en tu casa sin forzar a cerradura. Además, los delincuentes ya pueden sonsacarte información sensible a través de las redes sociales para hundir tu reputación o para hacerse con tus claves de entrada al banco, o incluso para convertirte en víctima de acoso