Publicado por Ana Etxebarria

6.45 AM Suena el despertador de mi BB. Como cada día lo apago, me desperezo y en cuanto soy capaz de abrir los ojos le echo un vistazo para ver qué hay de nuevo. Mhhhh! El icono del App World me indica que hay 4 nuevas actualizaciones. Una nueva versión de Foursquare, una de WhatsApp, una de Twitter y una de BBM. ¿Qué tienen estas nuevas versiones de especial? Pues por lo que veo, prácticamente nada, pero la experiencia me dice que, o actualizo, o no me van a dejar de aparecer nunca los molestos avisos de disponibilidad de versión nueva. Así que, muy a mi pesar, comienzo los procesos de actualización. Por supuesto, ocurre lo de siempre. Ya en la primera actualización, la BB se queda congelada y no hay otra forma de resucitarla que sacando la batería. Una vez se reinicia, opto por convivir con los mensajes de versión nueva antes de seguir sufriendo en ayunas y me voy a desayunar.

9.00 AM Llego a la oficina. Mientras mi ordenador arranca, voy a por agua, enciendo la calefacción, reviso mi agenda… Parece que ya está, pero justo cuando me dispongo a abrir el Outlook aparece en mi pantalla un mensaje de actualización disponible de Acrobat Reader. La verdad es que no sé cuántas actualizaciones sacará Acrobat, pero mi percepción es que al menos una a la semana… Así que después de la experiencia de la BB de hace un rato, opto por actualizar más tarde. Ahora no me apetece. Estoy rebelde. Pero,  ¿qué es ese icono nuevo que parece un escudo abajo a la derecha?, ¿pincho?, ¿no será otra actualización, verdad?… Pues sí, señores, en esta ocasión es Microsoft que amablemente me avisa de la disponibilidad de nuevas actualizaciones automáticas. Qué cansinos todos, de verdad, que hartura…

17.00 PM Hace días que no sincronizo mi iPad. Voy a aprovechar ahora que parece que estoy más tranquila. Abro iTunes, conecto el USB, y ¿qué es lo primero que veo en la pantalla? Bingo! Hay una nueva versión de iTunes disponible. ¡Pues NO la quiero, gracias!, ¡muy amables! Ya está bien, vaya día…  ¿Y ahora quéeeee?, ¿otro pantallazo?, No puede ser, arggggghhhhh!!!!! Esta vez lo que muy amablemente, y de forma totalmente gratuita, me ofrecen es  una nueva versión del software del iPad… No exagero ni un ápice. Mirad si no el pantallazo:

Me rindo, tiro la toalla. Ya no puedo más… Que hagan lo que quieran. Que me actualicen el software. Que lo hagan prácticamente a diario. Pero, por favor, que yo no me entere. Que sea de forma silenciosa. Que no me pidan ni permiso. Si total, al final aunque solo sea por insistencia siempre ganan ellos…

La moraleja de este post es la siguiente: Si yo hoy hubiera aceptado todas las amables ofertas de actualizaciones disponibles para mis gadgets habría actualizado 3 máquinas diferentes, 7 programas de software y un sistema operativo. ¡Olé! Eso sin contar con las 52 actualizaciones que según el App Store tengo disponibles…

¿No os parece que algo que en teoría es muy positivo se está convirtiendo en una tortura para los usuarios?, ¿en una verdadera pesadilla?

¿Qué opináis vosotros?