novena ordenador

“¿Se han convertido los ordenadores en cajas negras incluso para los ingenieros electrónicos con experiencia? ¿Tendremos que confiar siempre en grandes y opacas organizaciones para que los fabriquen por nosotros? Nosotros decimos que no. Y para demostrarlo, hemos fabricado nuestro propio portátil”.

Con esta declaración de intenciones, los creadores de Novena resumen la filosofía de su peculiar proyecto: un ordenador con código y hardware totalmente abiertos. ¿El objetivo? Garantizar que el usuario tenga el control casi al 100% sobre la seguridad.

Con esta concepción, se trata de una máquina pensada sobre todo para expertos, ingenieros y hackers, pero también está al alcance de cualquier usuario preocupado por su privacidad gracias a una exitosa campaña de ‘crowdfunding‘ en la que el objetivo inicial (250.000 dólares) quedó ampliamente superado (con más de 780.000 dólares de recaudación).

“Queríamos inspeccionar y entender el sistema y sus componentes tanto como fuera posible”, explican los responsables de la iniciativa, “de tal forma que, si nos topábamos con algún fallo o comportamiento anómalo, pudiéramos confiar en nuestro ingenio para solventarlo y no en las promesas basadas en los beneficios (y a menudo vacías) de un proveedor”.

Por eso eligieron Debian, una distribución de Linux, como sistema operativo; y apostaron por una configuración de hardware (placa base, procesadores, módulo wifi, lector de tarjetas SD…) que se ajusta casi por completo a especificaciones libres, de tal forma que los usuarios pueden descargar los planos, la documentación, y conocer al detalle cómo construir o modificar la máquina.

novena pc

La idea es que la comunidad de usuarios puedan mejorar el código y cada uno de los componentes del terminal por su cuenta, o incluso sustituirlos por otros de su elección en base a sus necesidades. También podrán añadirlos sin problema, a diferencia de lo que sucede con los típicos ordenadores portátiles, que “son imposibles de hackear porque no hay sitio físico para meter otras cosas”.

“¿Quieres añadir un pulsioxímetro a Novena para medir el nivel de oxígeno en la sangre que corre por los capilares de tus dedos? ¿O tal vez un barómetro? Con un par de vueltas de destornillador podrás incorporarlos dentro de la carcasa del portátil”, afirman sus creadores.

novena cables

A cambio de tanta versatilidad, el ordenador es bastante diferente de lo que solemos ver en el mercado. En primer lugar por su aspecto, algo tosco y bastante grande, más parecido a los portátiles de hace una década que a uno moderno. En segundo, por su rendimiento: obviamente, no está a la altura de los ordenadores con Windows o Mac OS X que puedes comprar en cualquier tienda de electrónica (aunque es más caro).

“No nos engañamos a nosotros mismos pensando que podíamos fabricar un portátil más rápido, más pequeño o más barato que los de Apple, Dell o HP”, explican los padres de la criatura. “Sin embargo, si nos propusimos montar una máquina suficientemente potente y adecuada para un uso diario”.

Suficiente para cientos de personas preocupadas por la seguridad y la privacidad que ya han prestado su apoyo al proyecto a través de la financiación colectiva. En los tiempos que corren, tras las revelaciones de Snowden sobre el ciberespionaje, una iniciativa como esta siempre es bien recibida.

“Una transparencia como esta no tiene precedentes”, sentencian los responsables de Novena. “Esperamos que anime a otros ingenieros a seguir nuestros pasos y ayude a los usuarios a reclamar su independencia tecnológica”.