Android Oreo, ¿la actualización más dulce?

¿Qué tienen que ver con tu móvil una galleta Oreo, un donut, unos marshmallows o una piruleta? Aunque no te lo creas, indican cuál es la versión del sistema operativo de tu smartphone si está basado en la tecnología de Android.

Tras varios meses especulando sobre qué novedades traería la nueva configuración del nuevo sistema operativo de Android, los ingenieros de Google han presentado el 7 de agosto de 2017, coincidiendo con el día del eclipse solar, la versión 8.0, bautizada con el nombre comercial de Android Oreo. Esta nueva versión permite minimizar aplicaciones de video, que seguirán funcionando en una pequeña esquina de la pantalla, para que puedas hacer videollamadas mientras revisas tu calendario o escribes un email.

Sin embargo, esta forma tan ‘dulce’ de denominar a la nueva ‘release’ de Android no es nada nuevo. La primera versión de Android se llamó Android 1.0 y se lanzó allá por septiembre de 2008. Un año y medio más tarde se liberó la versión 1.1. A partir de ese momento, cada una de las modificaciones del sistema operativo de los móviles de Google ha sido con un nombre más dulce que el anterior.

Android Cupcake

Tras la 1.1, vino la 1.5 tres meses después, en abril de 2009. Aunque esta versión incluía actualizaciones realmente útiles para sus usuarios como el uso de las fotos de tus contactos para mostrarlos en la pantalla cuando recibes una llamada, o la grabación en formatos MPEG-4 y 3GP, esta ‘release’ de Android será siempre recordada por ser la primera que tuvo un nombre tan dulce como Cupcake.

A partir de entonces, todas las nuevas actualizaciones del sistema operativo de Android han tenido nombres realmente irresistibles para los más golosos.

Android Donut

El primer atracón de golosinas nos lo dio Android ese mismo año 2009. Pues cinco meses después de Cupcake, en septiembre de ese año, se lanzó Donut. Esta versión traía un cuadro de búsqueda rápida y grandes mejoras en el Android Market. Pero, tan solo un mes después liberó Eclair que se correspondía con Android 2.0 y 2.1., con impresionantes fondos de pantalla en movimiento que respondían al tocarlos. Además, incluía la información del tráfico en directo para que pudieras elegir la ruta más rápida para llegar a cualquier sitio en coche.

Un yogur helado

Pasó casi un año hasta que Android decidió dejar ‘helado’ al mundo de los smartphones con su versión Froyo (acrónimo en inglés para referirse a los frozen yogurts o yogures helados). Esta nueva actualización hacía que los teléfonos Android se pudieran controlar por voz.

Galletitas de jengibre

Ya en diciembre de 2010, siete meses después de Froyo, se lanzó Ginberbread, que es como en inglés se denomina a las galletas de jengibre. Aunque seguía tratándose de la versión 2 de Android, esta nueva ‘release’ se usó para denominar a las actualizaciones 2.3 y 2.3.7 que ofrecía una experiencia realmente sencilla tanto para los usuarios como los desarrolladores de aplicaciones para los móviles con el sistema operativo de Google. Además, fue la primera vez que se integró la tecnología NFC, con la que entre otras cosas, se pueden realizar pagos con el móvil como si fuera una tarjeta de crédito.

Un Android dulce como la miel

Sin embargo, sólo pasaron tres meses hasta que Android liberó, en marzo de 2011, Honeycomb (en inglés panal de miel), que marcó el inicio en la era de las tablets Android con una interfaz muy sencilla en la que se podían incluir imágenes de gran formato.

Sandwiches helados

Pasaron bastantes meses sin novedades en el sistema operativo más usado del mundo. Pero en octubre de aquel mismo año se lanzó la versión 4.0 denominada Ice Cream Sandwich. Con ella, Android volvió a dejar ‘helados’ a millones de usuarios gracias a una nueva tecnología de control y personalización del usuario que podía configurar su móvil a su antojo.

Chucherías

Tuvo que transcurrir casi un año hasta que en julio de 2012 se lanzó la versión 4.1 de Android, bautizada con el nombre de esas golosinas con forma de habas: Jelly Bean. Fue el primer paso en la inteligencia artificial de los teléfonos Android con el inicio de la asistencia personalizada con Google. Además, esta ‘release’ permitía usar distintos usuarios desde el mismo teléfono móvil.

Tras un largo ‘descanso’: Kit Kat

Los avances de la versión 4.1 fueron tan aclamados por los usuarios de Android que la siguiente versión tardó más de un año en ser liberada. Pero, en octubre de 2013 salió a la luz Android Kit Kat con su revolucionario “OK Google”. Con sólo decirle esas palabras a tu móvil podías iniciar cualquier búsqueda con tu móvil obtener las indicaciones para llegar a cualquier sitio o reproducir una canción.

La piruleta de los móviles

La versión Lollipop (en inglés, piruleta), que se liberó en noviembre de 2014, hace que Android deje de ser un sistema operativo exclusivo para móviles y tablets. Esta versión que se corresponde con las actualizaciones 5.0 y 5.1.1 hizo que entrasen en nuestras vidas los relojes, coches y televisiones inteligentes basadas en la tecnología de Android.

Un Android por las nubes

Parece que desde Jelly Bean Android comenzó a lanzar una única actualización al año. Así que 13 meses después de Lollipop, en octubre de 2015, Google lanzó Android Marshmallow. Los dispositivos (recordemos que ya no solo los móviles y las tablets) se volvieron todavía más dulces con la opción Google Now a un Toque, que ofrece accesos directos sencillos y respuestas inteligentes, así como un gran avance en la seguridad de los dispositivos.

Turrón en verano

En junio de 2016 se liberó la versión Nougat (turrón en inglés). En esta ocasión, los ingenieros de Android hicieron posible la multiventa y un soporte para la realidad virtual para cualquier dispositivo que cuente con el sistema operativo de Google.

Hace años nos parecía imposible la idea de mojar un teléfono móvil sin que se rompiera. Hoy la última campaña de publicidad de Samsung se basa en fotos sacadas con el nuevo Galaxy S8 desde dentro de una piscina. Quién sabe si la versión 35 de Android, en caso de que Google siga lanzando una versión al año, hará que podamos pedirle a nuestro smartphone o smartwatch que nos cocine unas galletas con chocolate.